Caminante no hay camino
Cada cierto tiempo nos da por pensar en qué había al final de los otros caminos. Al final y durante los otros caminos. Aquellos que no escogimos. Los que dejamos atrás para tomar otros. Supongo que es parte de nuestra condición humana darle tantas vueltas a cosas que no llevan a ninguna parte.
Reflexionando en frío me parece un ejercicio desastroso. Primero porque es difícil predecir. Nunca acertaremos. No dejarán de ser ensoñaciones... Y segundo porque cuando lo hacemos suele ser en estado de pesimismo o tristeza. Y entonces los caminos no escogidos imaginados tienden a ser mejores que los escogidos vividos. Y es que resulta que todo tiene su parte buena y su parte mala. Y es que resulta que todo hubiera tenido su parte buena y su parte mala.
En cada momento intenté escoger el mejor camino, pero no siempre lo hice, supongo. Y desde que nuestros caminos se encontraron a veces cedes, a veces cedo, a veces cedemos. Pero siempre buscando la ruta buena. Disfrutemos del paisaje cuando sea hermoso. Ayudémonos cuando sea duro. Protejámonos cuando sea peligroso. Cojamos un desvío si creemos que hay que cambiar de rumbo. Retrocedamos si no escogimos el camino bueno. Pero no imaginemos que los senderos que dejamos atrás eran mejores que estos.
Reflexionando en frío me parece un ejercicio desastroso. Primero porque es difícil predecir. Nunca acertaremos. No dejarán de ser ensoñaciones... Y segundo porque cuando lo hacemos suele ser en estado de pesimismo o tristeza. Y entonces los caminos no escogidos imaginados tienden a ser mejores que los escogidos vividos. Y es que resulta que todo tiene su parte buena y su parte mala. Y es que resulta que todo hubiera tenido su parte buena y su parte mala.
En cada momento intenté escoger el mejor camino, pero no siempre lo hice, supongo. Y desde que nuestros caminos se encontraron a veces cedes, a veces cedo, a veces cedemos. Pero siempre buscando la ruta buena. Disfrutemos del paisaje cuando sea hermoso. Ayudémonos cuando sea duro. Protejámonos cuando sea peligroso. Cojamos un desvío si creemos que hay que cambiar de rumbo. Retrocedamos si no escogimos el camino bueno. Pero no imaginemos que los senderos que dejamos atrás eran mejores que estos.
por Raist 5:13 p. m.
18 Bites:
Yo nunca hago ese ejercicio. No me arrepiento de nada de lo que he hecho ni del camino escogido. Es una manera como otra cualquiera de no atormentarme. Y me comporto así porque sé que no hay ninguna máquina del tiempo que pueda hacerme retroceder. Soy como soy ahora, por cada uno de los pasos que he dado, si no, sería otra yo diferente.
Pues eso, se hace camino al andar (el pan y el vino que no falten) Saluditos desde esta orilla...
Me acuerdo de cuando, de pequenyaja, leía los libros de "Elige tu propia aventura", esos en los que según lo que decidías hacer ibas a una página o a otra. Hacía trampas siempre. Leía con un dedo en la página anterior para poder volver atrás si no me gustaba dónde había ido a parar. Y miles de veces, me arrepentía de la opción elegida y volvía atrás, a re-elegir el otro camino ;-)
La vida no es un librojuego, claro. No puedes cargar la partida y actuar diferente. Y a veces da tanta rabia...
Buena filosofía de vida. Aunque a mi ni siquera me da por retroceder cuando voy por un camino complicado. En el fondo no hay caminos buenos ni malos. Y casi todos llevan al mismo sitio...
Es bueno reflexionar, pero mejor aún haber vivido y poder hacer cuentas de ello, aprender... me gusta que no imagines los caminos que no escogiste, es mejor disfrutar y preocuparse por los que ahora se abren, se comparten, se descubren a nuestro paso :O)
saludos y sonrisas...
anjara
Hay veces que incluso tomando el mismo camino, hay decisiones replanteables. Desde luego es un mal ejercicio.
La cita me ha encantado.
Yo soy una experta en meterme en ese tipo de reflexiones en épocas de melancolía profunda.
Pero cuando me preguntan si de verdad cambiaría lo que he aprendido, lo que soy, lo que he ido ganando con mi esfuerzo entre aciertos y equivocaciones... no me queda más respuesta que ser verdaderamente sincera conmigo mismo y aceptar que pese a todo, mis caminos siempre habrán valido la pena.
Y a veces me duele mucho no haber cambiado de rumbo, no haber tomado otras decisiones, no haber sido más valiente, más sensata, más decidida, más segura... pero entonces estoy segura de que no sería quien soy, y no estoy tan segura de que la persona que sería entonces verdaderamente fuera mejor aunque imagine para ella una vida mejor.
Se hace camino al andar, sin duda...
Quizás solo se trate de buscar, pero no para encontrar, sino para tener una esperanza... dar vueltas y vueltas para no llegar a ningún sitio como remedio para no quedarnos dormidos en las veredas del camino. Llegar allí donde siempre quisimos y darnos cuenta de que no queremos quedarnos, seguir otro poquito más, cambiar el destino.
Sí, quizás no se trate de encontrar, sino simplemente de buscar.
como todas las elecciones, dejan lugar a un pequeño e insignificante( a veces ) que hubiese sido si...se nos olvida, el camino es mucho más deslumbrante.Saludos
Cada eleccion que hacemos nos abre una puerta, por la que avanzamos, y nos cierra docenas a las que renunciamos, y nunca llegaremos a saber que había destras de esas otras puertas.
Hay que intentar acertar en las elecciones que hacemos, y no podemos pararnos a pensar lo que habría detras de las otras puertas, puesto que nunca podremos saberlo, y además quizás son cosas sorprendnetes que nunca hubiesemos podido llegar a imaginarnos.
La realidad , con frecuencia, supera cualquier prevision que podamos hacer sobre el futuro.
Un filosófico abrazo
JM
Elegimos un camino y siempre pensamos si es el correcto..pero eso no lo sabemos,piensa q si hubieras escogido otro camino tu vida no seria la misma..
Un abrazo Raist.
creo que ayer ya lo pensé y es que, lo importante del camino no es el final del camino, sino el recorrido, disfrutar del paseo, sentir, pensar, vivir, amar...
No sabes cómo me identifico con tus palabras...Tendrían que prestarnos dos o tres vidas (por lo menos) para experimentar ¿qué pasó si hubiera...? No por arrepentimiento de lo que hicimos, o sí; sino por saber, por conocer, por descubrir, por aprender...
¡eso sí que sería cojonudo! Eh!!
¿Sanbías que por regalo de reyes le hice a mi niño, con cartulina negra, 4 pies=2pasos, en donde le escribí precisamente la frase introductoria al post?
:D
Quería que se plantease precisamente lo que tú mismo planteas.
Muchos besos y feliz año de razonamientos*
No sirve de nada lamentarse, torturarse o idealizar, los caminos que dejamos atrás. Si los dejamos sería por algo, por lo que fuera, pero esa opción ya la tomamos.
Ahora a seguir dilucidando caminos por delante.
A veces creo que la vida es una especie de libreta de ahorros. Depositas y retiras constantemente, a veces haces buenas inverciones, a veces éstas son terribles, pero a la final, y si eres medianamente inteligente, creces, y hasta puede llegar a ver ese raro misterio de madurar.
Pues cuanta razón llevas, porque si, cuando peor nos sentimos, más nos da por pensar lo que no debemos, y si, es utópico creer que el otro camino es mejor. Sería distinto y posiblemente tan traumático como el que tomamos y que nos lleva (ahora) a cuestionarnos por qué lo cogimos.
Me encanta.
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